jueves, 11 de enero de 2018

"AMAR ES ACTUAR" O EL SUEÑO DE UNA CALLE PARA LOS REPUBLICANOS ESPAÑOLES EN PARÍS


   “Amar es actuar” escribió Víctor Hugo[1]. La filosófica frase del escritor francés reza en la fachada del liceo Víctor Duruy del 7° distrito de París, donde paseo a menudo.
   Me encantan allí ciertos edificios con increíbles fachadas de la calle Varenne, los portales de la calle Barbet de Jouy  con  picaportes o aldabones pesados, que me recuerdan los de las casas pudientes de la calle Real de cierto pueblo toledano, los leones esculpidos al lado de la librería del Bulevar de los Inválidos, el monumento a François Copée donde descansan las palomas parisinas, enfrente del puesto de flores “Monceau fleurs”. En ese distrito se codean la tradición más rancia y refinada y la modernidad geométrica y fría del edificio del Consejo regional de la calle de Babylone,  esquina con el Bulevar de los Inválidos, donde se leen actualmente carteles con fotos de jóvenes : “liceos abiertos sobre lo internacional” reza hoy un cartel con una joven  sonriente llevada a hombros de un joven. La torre de la delicada iglesia Saint-François Xavier pone su nota vertical en el paisaje,  haciendo juego con la Torre Montparnasse  al fondo, entre árboles que ya perdieron su follaje. La panadería  pintoresca de los Inválidos, al lado de los jardines colgantes de un edificio moderno de la avenida de Villars, que semejan el sueño de un arquitecto ducho en quimeras babilónicas, los Burgueses de Calais de bronce en el jardín del Museo de Rodin, la fachada increíble del ministerio de Agricultura y …la calle Monsieur, esquina con la de Babylone. Al final de esa calle ondea una bandera roja con estrellas, me acerco, intrigada, pasando delante de varios edificios aristocráticos como el Hotel de Bourbon-Condé. Me detengo delante del poste con inscripción histórica : “…en 1778, el arquitecto Brongniart obtuvo la autorización de abrir la calle Monsieur en un  terreno… allí edificó varios hoteles,  entre ellos el de Bourbon-Condé para la Princesa Louise-Adélaïde de Bourbon-Condé.” Esa “princesa vivió en la calle Monsieur hasta 1789”. “Al volver de la emigración fundó” un convento. O sea que se exilió dicha princesa, cuyo majestuoso hotel es ahora vecino  del edificio del de la República popular de China, en el que ondea una soberbia bandera roja con estrellas. Cerca de la Asamblea nacional de la República francesa, se encuentran, pues, calle Monsieur, el Hotel Bourbon-Condé y una de las embajadas parisinas de la República popular de China.
  ¿ Por qué no soñar, aunque no seamos chinos, en este año 2018, que se hubiera exiliado Monsieur o sea el  Señor Hermano de Louis XVI, futuro Louis XVIII, que vivió de 1755 a 1824 y que,  por algún milagro administrativo inaudito,  la calle Monsieur del 7° dsitrito de París pasara a denominarse,  para regocijo de los demócratas y republicanos españoles (y también de algunos franceses), calle de los Republicanos españoles, reducidos por ahora a conformarse con la del proletario barrio de la ciudad de Bobigny, en las afueras de París, muy bella y larga calle,  pero alejada del casco urbano y algo aislada en barrios nuevos ?
¿ Por qué los Republicanos españoles, grandes y primeros heroicos luchadores contra el fascismo no podrían tener como la República popular de China, un sitio selecto en un distrito aristocrático de París en 2018 ?
 ¡ No dejemos de soñar ¡
París, 10 de enero de 2018
Rose-Marie Serrano (Amigos de los Republicanos españoles de Región parisina)























[1]«  Aimer c’est agir »



No hay comentarios:

Publicar un comentario